Lee Fields y Charles Bradley celebran el 25 aniversario de la revista Ruta 66

Lee Fields nació y creció en el pequeño pueblo de Winston, Carolina del Norte, fue uno de cuatro hijos. Se paso sus años de adolescencia cantando en la iglesia y escuchando a artistas de R&B como James Brown, The Tempations, Eddie Floyd, Otis Reading y el sonido clásico de Menphis de los sesenta. Formo parte de varias bandas interraciales en el sur y empezó a tocar en circuito e colegios que incluían La Universidad de Carolina del Este y el Duke University y el Georgia Tech. Por lo 60s, Lee empezó su carrera de cantante, trabajando con bandas que pondrían los cimientos en la fundación del Funk incluidos Kool and the Gang, Samy Gordon and the Hip Huggers, y Little Royal. Renombrado a través de toda la comunidad funk internacional, Lee Fields ha derramado sus gruñidos y gritos a través de un legado de hits de soul y funk desde los primeros sesenta, incluidos singles como "She´s A Love Maree”, “The Bullis Comino” o “The Funky Screw”, por no mencionar su bien buscado "Lets Talk It Over". Este LP se vende por cifras de cuatro dígitos entre coleccionistas de todo el mundo. Sus grabaciones de funk duro purista en Truth & Soul, Desco y Daptone Records en los años recientes han consolidado su puesto como el Rey de la música funk contemporánea. Cuando empezó Truth and Soul como un sello de discos en 2004, la primera misión de los dueños del sello, Jeff Silverman and Leon Michels fue grabar un disco de dulce sol que pudiera ser moldeado a partir de la fórmula perfecta de bandas como los Moments, The Deftonics y The Stylistics habían creado. Una música que era a la vez dura y dulce como la miel. Música que fluye atada entre las cuerdas exuberantes y las suaves armonías vocales a través de duros ritmos. Michel y Silverman se ha juntado para varias asociaciones y una de ellas incluyo a Lee Fields, y grabó el single "Do You Love Me" b/w "Honey Dove", y lo que ocurrió en estudio fue pura magia, así nacieron The Expresions. Durante casi dos años Lee Fields & The Expresions han creado satisfactoriamente un único y personal sonido que puede codearse al nivel de las bandas que han querido emular. De todas maneras lo que se creo fue algo parecido a un calco de dulce música soul. La música fue desarrollándose dentro de una mezcla llena de soul profundo, de lo antiguo y de lo nuevo. La fórmula es la misma, pero el estilo se ha adaptado a los oídos de la gente que no creció con bandas como Al Green o Sam Coke. Elementos de la música moderna han roto su papel en la mezcla para crear algo totalmente único y nuevo. The Expressions han hecho honor a su nombre, cada canción que ellos componen está llena de fuertes emociones.

CHARLES BRADLEY

Para Bradley el álbum es la culminación de toda una vida dedicada, nómada durante décadas en las que ha tenido diversos trabajos de día desde Maine hasta Alaska, cantando y actuando en su tiempo libre, antes de instalarse de nuevo en su ciudad natal Brooklyn para finalmente encontrar a su casa discográfica en Dunham Records. En su distintivo y áspero timbre uno oye la inequívoca voz de la experiencia, cada nota y cada inflexión son un reflejo de su amplio y personal trazo vocal. Solo faltaba que el productor reconociera en Bradley su espíritu y valía musical. Un cantante que en sus shows emana a la vez poder bruto y belleza conmovedora. La Menahan Street Band (un grupo de músicos estrellas de bandas como los Dap-Kings, The Budos Band, Antibalas, The Michels Affair y Lee Fields and The Expressions) apoya a Bradley a través de todo el repertorio con una especial atención al detalle. La robusta "The Golden Rule", que es conducida por un brillante y sonoro órgano cargado hasta arriba de groove, encuentra a Bradley lamentando la pérdida de principios en esta sociedad en un tono de amor y hermandad. "I Believe In Your Love" da su testimonio a través de unos insistentes metales, con reminiscencia de la Stax, acentuados con un reverberado xilofón. La movida y autobiográfica "Why Is It So Hard" cuenta sus vivencias personales con un un fervor cercano al gospel. La indefinible "No Time For Dreaming", una confluencia de interpretación decidida, arreglos precisos, y canciones con un sonido tan sólido que se podría forjar metal en él. Grabado en Dunham Studios, y mezclado en Daptone Records, la renombrada casa del sol, es sonido inspirador de un despertar.